Un reto actual en la educación es aplicar en el aula la sostenibilidad como un objetivo de aprendizaje prioritario en nuestras programaciones que busca en nuestros alumnos los futuros eco friends para conseguir un mundo más sostenible.
Hacerlo es una tarea que puede resultar a primera vista difícil, pero se puede conseguir.
¿Qué ODS están implicados en la educación emocional?
¿Cómo?
Con la educación emocional se puede mejorar las competencias, actitudes y conductas que ayudan a cuidar nuestro entorno natural. Sí uno es feliz porque la calidad de vida o nivel de vida es bueno se tienen más pensamientos emocionales positivos que te llevan a ser más eco friend y a ayudar a que los demás también lo sean.
El autoconocimiento, la autoestima, el autocontrol, la resiliencia, la motivación, el conocimiento y la valoración del otro, el liderazgo, la empatía, la responsabilidad y la toma de decisiones éticas son formas de pensamiento que se trabajan con los alumnos desde cada materia en proyectos, actividades y tareas diarias, partiendo de la emoción agradable para luchar contra la frustración y el negativismo.
Trabajando ODS e inteligencia emocional en San Gabriel se es más creativo, se motiva mejor, se conoce más a uno mismo y a los demás, se comunica más, se es más empático, se acerca más uno al otro, se es más tolerante y más líder para tener en cuenta a los más débiles y por lo tanto se es más consciente y comprometido con la sostenibilidad.
Cierto es que la actitud de respeto ayuda a los objetivos del desarrollo sostenible, pues puede hacer cambiar o mejorar el pensamiento que tenemos hacía nuestro entorno natural, es decir, primero darse cuenta de cómo lo cuidamos y después que debemos hacer para cuidarlo más y mejor.
Ejemplos de actividades para trabajar en el aula desde las primeras etapas de la educación primaria hasta las de bachillerato que contribuyan a lograr cada uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible serían plantearles debates, mesas redondas, o círculos de diálogo donde los estudiantes discutan cómo el desarrollo de habilidades emocionales como la empatía, la resiliencia, la toma de decisiones conscientes, favorece la adopción de comportamientos y actitudes responsables y sostenibles, identificando así los beneficios a nivel individual, comunitario y global.
Otra idea para las etapas de edades más tempranas sería crear murales donde relacionen cada ODS con una emoción de las anteriormente descritas y explicarles cómo puede contribuir esta a alcanzar esos objetivos.
Actividades como juegos de roles, ejercicios de mindfulness, reflexiones escritas y proyectos colaborativos promueven la empatía, la autorregulación emocional y la resolución pacífica de conflictos fomentando la conciencia y el cuidado de uno mismo, de los demás y del entorno.
ODS e inteligencia emocional en San Gabriel, se trabajan de manera que nos ayude a formar personas más conscientes y comprometidas con la sostenibilidad, impulsando cambios positivos en su estilo de vida y en su relación con el medio ambiente que nos lleven en un futuro al ansiado y necesario cambio global que busca la agenda 2030.